Mentirijillas

Oye que se me dan mal las mentirijillas. Mira que me gusta de vez en cuando echar alguna, pero se me dan de mal… Y cuando las tengo que echar por necesidad real: peor. Con lo fácil que es en realidad. Yo de chico las soltaba como churros.

Mamá: ¿Has comido chucherías?
Ktulito: No mamá…
Mamá: ¿Seguro que no?
Ktulito: No mamá, que luego no tengo hambre para la cena…

Qué bien aprendido me lo tenía. Pues nada, que ahora como no me las creo ni yo… También es que me he malacostumbrado a soltar tantas chorradas que no sé como hay gente que las cree (que la hay, tengo testigos) que cuando intento soltar alguna mentira de verdad (soltarla de verdad, no que la mentira sea de verdad, que si no no sería mentira… ¿no? Yo me entiendo) pues la cosa sale mal…

Smithers, ¿quién es este individuo?
Soy el señor Burns… Uh

Por eso a veces ni lo intento y me quedo callaito… Que dicen que callaito se está más guapo. Y que en boca cerrada no entran moscas… Aunque el que calla otorga, y eso a veces es contraproducente. Señores: ¿Qué hago?

Pues decir la verdad, ¿no? Pues no. Eso es el camino fácil, y a mi no me han educado para seguir el camino fácil. Porque es el camino fácil ¿no? Mentir implica inventarte una historia, buscarle coherencia espacial, temporal y posibles coartadas (que si mentimos mentimos bien). En cambio decir la verdad no requiere ni sobrecargar la neurona con atropeyos de perritos que entre ladrido y ladrido te pedían que los llevases al hospital macarena, que en el veterinaio los tratan mal, ni con viruses centroafricanos que te tienen en cama con 46º de fiebre que marca tu termómetro amarillo de toda la vida, y gracias a que ya me ha bajao porque estaba antes a 53 y algunas décimas…

Aunque ahora que lo pienso, realmente el camino más fáciles quedarse callaito, que no gastas fuerzas en mover la boquita (que es un gasto calórico que ahí está…) ni mucho menos gastas neuronas pensando historias que sólo se creería Iker Jiménez. Bueno, es que él me montaría un espacial de 2 capítulos contando cómo fui abducido y posterioremente liberado sin más (bueno, y sin móvil) por extraños seres venidos del polígono San Pablo…

Así que todos callaos como perras. Shhhhhh

  1. #1 por Carlos el 31 May, 2007 - 13:27

    No debería comentar… debería guardar silencio… aunque yo soy uno de esos testigos que sabe la realidad de la vida.

    PD: Sshhhhh

  2. #2 por Marta el 1 junio, 2007 - 11:50

    Cuestión espinosa ésta de la verdad, la mentira y el silencio… A mí lo que más me ha gustado ha sido la conversación de Ktulito con su mamá ¡jeje!

Replica a Marta Cancelar la respuesta